El café se ha convertido en parte importante de la rutina de muchos. Ya sea para comenzar el día, para acompañar reuniones laborales o para hablar con amigos. Sin embargo, debido a la fama del café y la facilidad con la que se consume hoy en día, muchos nos hemos vuelto dependientes de la sustancia conocida como cafeína.
¿Qué encontrarás en este artículo?
¿Qué es la cafeína?
Es un alcaloide que estimula el sistema nervioso central, por este motivo también puede ser considerada una droga psicoactiva. El estímulo hace que el sistema se sienta más despierto, lo que da la sensación de más energía.
Problemas de tomar mucho café
La cafeína funciona como un diurético, que ayuda al cuerpo a deshacerse de agua y sal, por lo que desafortunadamente puede causar deshidratación. Igualmente, esta sustancia puede generar problemas en el estómago (debido a la liberación de ácidos y afectar la presión arterial). Algunas personas comentan que no pueden consumir cafeína ya que les causa taquicardia.
Si estás experimentando alguno de estos problemas pero te consideras un amante de la cafeína, puedes encontrarte en una encrucijada. Sin embargo, más allá de los beneficios de tomar café, debes pensar en los motivos positivos por los cuales dejar esta sustancia
Beneficios de dejar el café
Algunos son:
- Mejora la calidad del sueño ya que se regulan correctamente los niveles de energía a lo largo del día.
- Se bajan los niveles de ansiedad y estrés. Al enfrentarnos a situaciones alarmantes durante el día a día, el café es una sustancia que nos puede quitar la tranquilidad que necesitamos en esos momentos.
- Disminuye la tensión arterial y evita taquicardias
¿Cómo dejar el café?

Primero reduce gradualmente el número de tazas que consumes al día. Si tomas alrededor de tres tazas de café, dejarlo de un día a otro puede ser contraproducente. El cambio inmediato puede causar dolores de cabeza e irritabilidad.
Acostumbra tu cuerpo y crea nuevos hábitos, de forma que esta meta sea un cambio gradual que no genere conflicto en tu vida diaria. Puedes proponerte el siguiente cronograma.
Día 1 y 2: Dos tazas y media de café
Día 3 y 4: Dos tazas
Día 5 y 6: 1 taza
Día 7: Media taza
Día 8: Ninguna taza
También te recomendamos que durante el anterior proceso empieces a consumir otras sustancias como lo son el cacao, el té verde y el té mate. Si reemplazas el consumo de café por otras sustancias más saludables será más sencillo acostumbrarse a la falta de cafeína.
Si estás luchando con esta decisión debido a una preocupación por tus niveles de energía, te invitamos a leer el siguiente artículo: Combatir el cansancio de forma natural.